El tema de las adicciones es una de las grandes problemáticas de las sociedades modernas.
NOTICIAS POSITIVAS entrevistó a Guillermo Comas, quien además de ser Instructor de gimnasia, es operador socioterapeútico en adicciones y director de un polideportivo de Zona Norte. Desde hace años, trabaja como coordinador de grupo en el área de adicciones dentro de Proyecto Uno.
“Del tema de adicciones sé por trabajar y por haber experimentado una historia de vida. Hoy es una historia de mi pasado que me ha dejado marcas y por eso me dedico a la ayuda de personas con ese mismo problema”, señaló Comas.
En relación con los adolescentes y el comienzo temprano en esta problemática, nuestro entrevistado sostuvo que “los chicos hoy han empezado a consumir más rápido en cuanto a la edad que en otras épocas. Es muy frecuente que un adolescente de 14 o 15 años beba alcohol. La primera droga es el alcohol, que atraviesa todas las clases sociales y está muy presente. Actualmente hay comas alcohólicos en chicos muy jóvenes. Muchas bebidas se consumen con energizantes que son muy nocivos”.
En este sentido, Comas también señaló que el ingreso de los adolescentes a las adicciones es muy complejo porque es una etapa muy complicada, “porque los amigos y pertenecer al grupo significan algo muy fuerte. Hoy la marihuana está muy libre, hay una desfachatez muy grande para consumirla y todo esto acelera la problemática”.
En relación con el grado de adicción que generan las sustancias, Comas expuso su situación personal: “Yo empecé a consumir y no pude parar. Hay quienes pueden frenar pero muchos no, el cuerpo te lo pide y te sentís un superhombre. Hay que trabajar mucho para superarlo. Y, siendo adulto, pude pedir ayuda y me interné en una comunidad, teniendo dos hijos chiquitos. Y fue una muy buena decisión el haber pasado por ese lugar, con esas personas y haber compartido con profesionales dedicados a la tarea con amor y respeto”.
En su rol como padre, nuestro entrevistado aceptó que muchas veces es difícil tratar estos temas con los hijos ya que no aceptan mucho los consejos de los padres. “Yo creo que los papás tenemos que mirar a nuestros hijos, a sus amigos, sin que se sientan perseguidos. Si el adolescente entra al consumo, se comienza a desestructurar, cambia sus hábitos, llega tarde, se levanta tarde, en algunos casos come demasiado y compulsivamente. Otro llamado de atención es la aparición de otras amistades que no son las que conocemos”.
Finalment, Comas señaló que para él “es bueno que los chicos hagan actividades, vayan al colegio, hagan deportes… el ocio los lleva por mal camino, el ocio no es bueno y la ciudad está muy complicada. Los padres deben ser socialmente responsables. Hay que informarse y ocuparse. Y evitar la negación”.