El próximo sábado 19 de marzo, a las 21 horas y en el DirecTV Arena, la compañía internacional de acrobacia Innovacirco presenta un espectáculo mágico: «Tigrou», acrobacia, música y danza para contar una historia para todo público.
El DirecTV Arena está ubicado en el ALG Center, Tortuguitas, Malvinas Argentinas, a 30 km del centro de la ciudad de Buenos Aires. Es el primer estadio en su tipo en la Argentina y uno de los más importantes de América Latina.
Fundada por el argentino Pablo David Pérez y el suizo Harald Krüger, Innovacirco ha actuado hasta ahora con «Tigrou», la historia de un niño perdido en un bosque que encuentra un castillo habitado por seres asombrosos, ante más de dos millones de espectadores en todo el mundo. La obra reúne en escena a un elenco de gimnastas, acróbatas, bailarines, músicos y cantantes. NOTICIAS POSITIVAS invitó al estudio de Radio Palermo a uno de los fundadores de la compañía, Pablo Pérez, para hablar del espectáculo y de su creación.
N+: -¿Qué significa Tigrou?
PP: -Es una antigua palabra en francés que ya no se usa más, pero que me gustó. Significa algo chiquito y lindo, como puede ser un cachorro. Le pusimos así porque nuestro primer espectáculo era chico, no tenía ni escenografía.
– ¿Cuál es tu historia?
-Soy mendocino. Me fui a Chile a estudiar arte y, en una visita que hice a Buenos Aires, fui a ver un espectáculo que se llamaba Gala, de Gerardo Hochman, en 1999. Ese día decidí que eso es lo que quería hacer. Me mudé a Buenos Aires y entré a la escuela de Hochman. Luego de recibirme fui a vivir a Suiza por una oportunidad de trabajo. Me fui con el director argentino Alfredo Arias, que estaba dirigiendo en ese momento ópera en París. Empecé a trabajar en una compañía en Suiza, bastante aburrida… Así surgió la idea de crear «Tigrou», como algo que no fuera aburrido.
–¿En qué se basa Tigrou?
-El espectáculo está basado en los períodos barroco y gótico, pasa todo en una noche. Un nene se pierde en un bosque y pasa la noche en un castillo abandonado, lleno de fantasmas. Tigrou tiene que pasar una noche en un castillo abandonado y se entretiene con su propia imaginación.
-Es la primera vez que se presentan en la Argentina.
-Nos presentamos en el DirecTV Arena, un predio para 15.000 personas, y a dos días de haber salido a la venta las entradas ya tenemos vendidas casi la mitad, lo cual me pone muy contento y entusiasmado.
-Tu espectáculo tiene que ver también con el Cirque Du Soleil, ¿existe alguna relación entre ustedes?
-De hecho, muchos de nuestros artistas han trabajado en alguno de los 36 espectáculos que ellos organizan. Y a propósito de eso, se comunicó con nosotros la manager de Cirque Du Soleil y vamos a organizar un intercambio cultural en el Teatro Lola Membrives.
-Hay una estrecha relación en el espectáculo que ustedes producen y la naturaleza.
-Yo personalmente soy un amante de la naturaleza. Genera una inocencia sana, disfrutar por disfrutar. Hace unos años un cronista me comentó que no entendía el espectáculo, y yo le contesté que no había nada que entender, sino que simplemente se trata de relajarse, sentir y disfrutar. Nuestro lema interno es el de «provocar, evocar y emocionar»: el acróbata no habla, transmite sensaciones, sentimientos. Creo que es un poco lo que tiene el teatro: es un acto de fe, porque yo pago la entrada y una vez que pago me entrego. Es uno de los pocos momentos de «meditación colectiva» que tiene la humanidad. Vamos todos a poner el foco en una sola cosa. Veo al teatro como un momento íntimo y espiritual.
+ INFO: entradas a la venta en www.tuentrada.com (valores que van de $ 170 a $ 470, según la ubicación)