NOTICIAS POSITIVAS asistió al desayuno de prensa en el que el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en la Argentina presentó la edición 2017 del Informe Nacional sobre Desarrollo Humano, dedicado esta vez a analizar el panorama del Desarrollo Sostenible en nuestro país, con vistas a los compromisos asumidos al suscribir la Agenda 2030 y los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Fue una oportunidad inmejorable para entender qué es lo que se está haciendo, o, mejor dicho, qué se puede hacer, para lograr alcanzar los ODS, que a pesar de ser una gran iniciativa global en pos de un futuro mejor, no siempre parecieran estar en primer lugar en la agenda de los países que acordaron cumplirlos.
René Mauricio Valdés, el representante residente del PNUD y coordinador residente del Sistema de Naciones Unidas en la Argentina, dijo que «los ODS buscan atacar problemas económicos, sociales y ambientales, a diferencia de los Objetivos del Milenio (ODM), que solamente atacaban cuestiones económicas». También destacó que la Argentina, al igual que otros países de la región y el mundo, logró cumplir con muchos de los Objetivos del Milenio (ODM), pero hoy este logro por sí mismo ya no alcanza: «Ya no sirve medir la pobreza solamente en términos salariales y monetarios, hoy hay que pensar también en el contexto social y ambiental».
El informe, de naturaleza muy técnica y con muchos datos duros, se divide en tres partes. La primera, titulada «Argentina: la información del desarrollo sostenible», analiza la información disponible sobre el desarrollo sostenible en el país, con un foco especial en las tres dimensiones del desarrollo sostenible (económica, social y ambiental). La parte II, «El sistema estadístico hoy y mañana», analiza la situación actual del sistema estadístico argentino y lo compara con otros sistemas estadísticos más exitosos. La última parte del informe, «Nuevos datos para nuevas políticas», hace un análisis especial sobre los datos masivos (comúnmente llamados Big Data), y las nuevas prácticas de evaluación, especialmente lo referido a los métodos experimentales para políticas públicas.
Una de las herramientas más interesantes que se presentó en el informe es el Índice de Desarrollo Sostenible Provincial (IDSP), que buscó hacer una comparación de la situación en las distintas provincias que componen al país, siempre teniendo en cuenta las tres variables importantes del desarrollo sostenible (económica, social, y medioambiental). Cabe destacar que desde el PNUD advierten que el IDSP obtenido por el momento es un resultado preliminar, ya que la información estadística disponible hoy en el país no es de gran calidad en muchos aspectos, especialmente en el aspecto medioambiental, aunque también se refieren, en menor medida, a los datos sociales.
«Se trata de un índice geométrico y no aritmético, por lo cual el valor se incrementa más cuando las tres variables crecen en armonía. Es decir que el crecimiento de una o dos variables por sobre las otras dos no incrementa el índice en el mismo grado que cuando las tres variables crecen en armonía», explicó Rubén Mercado.
El índice ubicó a la Ciudad de Buenos Aires en un primer puesto, seguida de Chubut y Mendoza. Es importante destacar que en este mismo índice, las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, que juntas concentran a más de la mitad de la población argentina, se encuentran en los puestos 9º, 14º y 10º respectivamente. Y más interesante aún es el hecho de que 19 de las 24 provincias del país se encuentran por debajo del promedio nacional.
De los datos que surgen del análisis interno del país que hace el PNUD podemos concluir que la CABA es un ejemplo para seguir en lo referente a desarrollo sostenible, y que, dado que quien ahora es presidente del país fue jefe de Gobierno de la Ciudad durante casi una década (2007-2015), existen razones para ser optimistas respecto al futuro del país en materia de desarrollo sostenible. En síntesis, el informe vaticina que el desarrollo sostenible se da de manera heterogénea y desigual en Argentina.
El informe del PNUD también dejó al descubierto la mala calidad de la información disponible en Argentina si se quiere hacer uso de ella para cuantificar las metas de los ODS. De hecho, René Mauricio Valdés vaticinó que «el sistema estadístico argentino es débil», y que «la infraestructura del país invita a la manipulación de la información». El tema de la información es fun-
damental, porque, como dijo Rubén Mercado, «si se quieren lograr los ODS es importante que existan políticas públicas basadas en la evidencia, y para ello se requiere de más y mejor información». El informe dice que la Agenda 2030 plantea demandas significativas en relación con las estadísticas convencionales porque establece 231 indicadores para cuantificar y monitorear los avances relativos a las metas de los ODS. En ese sentido, la Argentina no dispone de información de gran calidad en las variables económicas, sociales y ambientales. La económica es la que mejor disponibilidad tiene, con un 55% de información de calidad; le sigue la variable social, en donde el 40 % de la información es de calidad; y por último se ubica la variable ambiental, en donde tan solo el 16 % de la información disponible es de calidad.
La última parte del informe del PNUD, que trata sobre el uso de los datos masivos y datos abiertos (Big Data), plantea varios desafíos para el país. En primer lugar, debemos afinar el rol del Estado en lo referido al Big Data, expandiendo la infraestructura y desarrollando profesionales especializados en el tema. Además, la Argentina debe trabajar en lo que es la apertura de la información pública, lo cual recordemos está consagrado en la Constitución Nacional en su artículo 75. En este sentido, existen avances importantes ya que en 2016 se aprobó la Ley 27.275 sobre el Derecho de Acceso a la Información Pública. El informe también pide que se supere la fragmentación de los datos que producen diferentes jurisdicciones, niveles y ramas del Gobierno, mediante la creación de archivos estandarizados de fácil acceso.
El Informe Nacional sobre Desarrollo Humano 2017 es una buena noticia porque, a diferencia de otros años, el PNUD ya está pensando el desarrollo humano como la consecuencia de un crecimiento armónico entre variables económicas, sociales, y ambientales. Esto demuestra el compromiso del PNUD con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y con la Agenda 2030, que son los sucesores de lo que fueron los Objetivos del Milenio (que a pesar de haber sido exitosos en muchos aspectos -como la reducción de la pobreza a nivel global-, no lo fueron en muchos otros, a tal punto que hoy el mundo se encuentra en una situación crítica tanto social como medioambiental).
Entusiasma ver que la más importante Organización Internacional se está ocupando del desarrollo humano sostenible, y que el gobierno nacional actual pareciera estar dispuesto a trabajar en pos de lograr los ODS. El miércoles 10 de mayo se hizo la entrega del informe a la ministra de Relaciones Exteriores y Culto de la Nación, Susana Malcorra, en lo que fue quizás el primer paso oficial hacia un futuro mejor.
+INFO: Informe Nacional sobre Desarrollo Humano 2017; PNUD Argentina