El 22 de marzo fue el Día Internacional del Agua. Desde NOTICIAS POSITIVAS, creemos que la mejor manera de celebrar ese día es tratando de concientizar sobre la importancia del recurso y así estimular su cuidado y protección. Educar y concientizar son dos tareas que desarrolla a la perfección el biólogo y ambientalista Raúl Montenegro, quien conversó con nosotros y expuso su punto de vista.
Este docente universitario cordobés es el creador de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente (Funam), y es su representante en el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas. Además, en 2004 recibió el Right Livelihood Award, conocido como el Premio Nobel Alternativo, y en 1998 el premio Un Futuro No Nuclear.
Con referencia a la celebración del Día internacional del Agua, Montenegro sostuvo que «el día que se conmemora tendría que servir para tener en cuenta que el verdadero dilema son las cuencas hídricas, pero además esas cuencas vinculadas al funcionamiento de una región o un país. Mientras no hagamos eso, por más que reduzcamos la cantidad de dióxido de carbono o en algunos lugares se planten árboles, la crisis va a seguir existiendo».
En este sentido, tener una mirada integral del problema es lo que va a permitir vislumbrar una solución. «Falta mucho para que pasemos de una visión superficial a comprender que nuestra supervivencia está ligada a las cuencas hídricas. Y me refiero tanto a las aguas superficiales como a las subterráneas», señaló Montenegro.
En la actualidad, uno de los problemas medioambientales más comentados por la opinión pública se desarrolla en la cordillera, donde se instalan las megaempresas mineras y donde pueblos enteros resisten esa actividad. Uno de los dilemas de la minería a cielo abierto es el gran consumo de agua que necesita. Montenegro afirmó que en Catamarca, por ejemplo, se consumen entre 55 y 95 millones de litros de agua por día por las mineras, que es el equivalente a lo que consumen muchas ciudades juntas. Al respecto, el especialista destacó que «cuando permitimos que se instale una megaminera en una cumbre hídrica, estamos afectando una parte fundamental de una cuenca de captación. Es necesario asumir el país como un mosaico de ecosistemas donde una de las formaciones más importantes por sobrevivir son las cuencas hídricas».
Por otro lado, remarcó que “hay temas que se hablan con demasiada ligereza”. Se refirió así a la preocupación que suscitan los intereses extranjeros sobre el Acuífero Guaraní. “En realidad, el agua no puede ser transportada de un país del sur a uno del norte, no hay capacidad energética para hacerlo”, indicó Montenegro, y agregó que “la verdadera amenaza no está en que se lleven el agua, sino en cómo estamos arruinando con contaminación un lugar de reserva”.
Finalmente se manifestó optimista y sostuvo que “en los últimos años se avanzó muchísimo, por lo menos a nivel de debate de temas claves fundamentalmente con los chicos en las escuelas”. Aunque destacó que “igualmente hay que profundizar, salir de la mera declamación para incursionar en la propia responsabilidad, lo cual es algo crucial. Nos hace falta asumirnos como responsables individuales, cada uno en su hogar, lugar de trabajo o esparcimiento. Porque el daño ambiental no se produce sólo en las megaminas, también se produce con los actos irresponsables que podemos tener al lavarnos los dientes o lavar los platos con cantidades irracionales de agua. La canilla es un arma letal si uno no la sabe usar bien. La responsabilidad de cada uno es el salto que tenemos que dar y todavía nos falta un caminito para recorrer”.
+ INFO: www.funam.org.ar