Hay actividades cotidianas que aumentan la concentración de gases en la atmósfera o el desperdicio de agua. Entre ellas, el lavado diario de la ropa. Pero esta tarea del hogar, tan habitual, también puede ser sustentable y eso lo ha demostrado la nueva propuesta, «Por un planeta más limpio», en la que las marcas reducen el impacto ambiental de sus productos y motivan a los consumidores a realizar pequeñas acciones para generar en conjunto una gran diferencia.
El primer paso se dio con las marcas Skip, Comfort y Vivere, cuando se incorporaron detergentes líquidos y suavizantes concentrados a estas líneas. Esta formulación reduce de manera significativa el uso del agua, materiales de empaque y emisiones de CO2 derivados del transporte.
Ahora le toca el turno a los jabones en polvo. Las marcas Ala, Skip y Drive modificaron sus fórmulas para poder, sin resignar resultados, reducir el impacto ambiental. Los envases son más pequeños, por lo tanto, los camiones cargan más paquetes y, al reducir los envíos, se achica la cantidad de dióxido de carbono eliminado. Como resultado de este cambio se logró reducir una cantidad de CO2 equivalente a quitar de circulación 23.400 autos, a eliminar las emisiones de un millón de lamparitas incandescentes o la cantidad que podrían absorber 50.000 árboles.
Claves para un lavado ecoamigable
«Por un planeta más limpio» propone:
-Utilizar polvos para lavar que minimicen las emisiones de CO2 tanto en su producción como en su uso.
-Seleccionar el programa de lavado adecuado para el nivel de suciedad. Usar ciclos cortos cuando sea posible.
-Lavar con agua a temperatura ambiente, así se evita el consumo de energía para su calentamiento.
-Evitar el uso de secarropa ya que tiene un alto consumo de energía.
-En caso de utilizar productos líquidos, elegir los que sean concentrados ya que generan menos desechos y emisiones de CO2 derivadas del transporte.