Según el Fondo Mundial para la Naturaleza, el tráfico de animales es el tercer negocio ilegal más redituable del mundo, luego del tráfico de drogas y armas. Una práctica clandestina que genera alrededor de 180 millones de dólares por año y en la que solo uno de cada diez animales comercializados sobrevive (ver fundacion-temaiken-proteger-la-naturaleza-educar-y-conservar/).
En nuestro país existen leyes nacionales, provinciales y convenios nacionales e internacionales que protegen a la fauna silvestre. Desde la Constitución Nacional (en su artículo 41), las Leyes Nacionales sobre Maltrato Animal (14.346/54) y sobre la Conservación de la Fauna Silvestre (22.421/81), hasta la adhesión al Convenio de Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica (Ley Nacional 24.375/94) y la Convención de Naciones Unidas sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Ley Nacional 22.344/80) .
Sin embargo, periódicamente se descubren cargamentos de animales silvestres para ser comercializados o zoológicos clandestinos como ocurrió con el recientemente descubierto en Balcarce, provincia de Buenos Aires, que fue desbaratado por acción del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación. El procedimiento, dispuesto por la Justicia, se realizó en ese distrito bonaerense con el acompañamiento de fuerzas de seguridad. Además de los ejemplares vivos, se encontraron numerosos trofeos de caza para los cuales no se pudo verificar su origen legal.
El Ministerio, a través de la Brigada de Control Ambiental (BCA), fiscalizó un campo ubicado en la localidad bonaerense de Balcarce, en cumplimiento de la orden de allanamiento librada por el Juzgado Federal de Mar del Plata n.° 1, enmarcada en una causa por infracciones a la Ley n.° 22421 de conservación de la fauna. Allí se hallaron más de 300 ejemplares vivos de fauna silvestre y 27 trofeos de caza, mantenidos en condiciones irregulares.
El procedimiento contra el tráfico de animales se desarrolló en un predio rural emplazado en la Ruta Nacional 226, que operaba como criadero clandestino de fauna silvestre. En el marco del proceso de fiscalización que llevaron adelante los inspectores del ministerio nacional, se constató la presencia de más de 300 animales en cautiverio, entre mamíferos y aves silvestres, además de los trofeos de caza hallados en el interior de una vivienda. Todo ello en transgresión de la normativa vigente que regulan el manejo de dicha fauna, y la tenencia y comercialización de productos y subproductos elaborados con base en esta. A partir de este allanamiento la Justicia investigará si el lugar estaba relacionado con la cría y venta, de manera clandestina, de animales para cotos de caza.
Tráfico de animales en Balcarce: su relevamiento
El plantel de animales relevado consiste en: dos tigres, 14 ciervos colorados, 12 antílopes, seis ciervos axis, 57 ciervos dama —48 adultos y nueve crías—, un guanaco, 10 pumas —ocho adultos y dos crías—, 20 pavos reales, un gato montés, una llama, un búfalo, 150 muflones, dos ñandúes, nueve jabalíes, una perdiz colorada, un loro hablador, un cardenal amarillo, una reina mora, un naranjero, un jilguero español y un amarillo, tres corbatas comunes, un mirlo moñudo, dos estorninos comunes y dos cardenales copete rojo. Se desarrollará un plan de evacuación para garantizar su bienestar.
Por otro lado, los trofeos de caza, que fueron decomisados por la BCA, consistían en un cuero de puma, un cuero, una cornamenta y cuatro taxidermias de ciervo axis, cuatro cornamentas de ciervo colorado, una taxidermia y 14 cornamentas de ciervo dama y una taxidermia de antílope de la India. El operativo fue motivado por denuncias anónimas recibidas por parte del Ministerio de Ambiente de la Nación, que aseguraban la presencia de fauna silvestre en la zona. En ese contexto, la citada cartera inició una investigación administrativa y giró las actuaciones a la Justicia, quien ordenó el allanamiento. Este se realizó de forma conjunta con personal de la Unidad Operativa Federal Mar del Plata, exdelegación Mar del Plata, de la Policía Federal Argentina.
Cabe indicar que la lucha contra el tráfico ilegal de fauna –un serio flagelo para la preservación de la biodiversidad– es una de las principales líneas de acción de la cartera de Ambiente nacional. En tal sentido, el Ministerio de Ambiente de la Nación actúa como órgano de aplicación de la Ley N.º 22421, que implementa la conservación de la fauna silvestre.