Los países tienen reglas de convivencia que se traducen en leyes. Por eso, para lograr cambios, no sólo hay que hacer las cosas de otra manera, sino que también es necesario que la legislación se adapte y maneje nuevos códigos. Es así que los abogados tienen hoy un rol protagónico dentro del contexto de las nuevas economías: para incorporar los nuevos principios (como los de las Empresas B, por ejemplo) en la práctica profesional, es clave el desarrollo de habilidades blandas, y herramientas y prácticas concretas en la comunidad de abogados.
Ese, justamente, es uno de los propósitos de la Primera Conferencia Internacional de Abogados B que se realizará, del 19 al 20 de junio, en Lima, Perú, convocada por la Universidad de Lima, la Universidad del Pacífico, la Pontificia Universidad Católica del Perú y el Banco de Desarrollo de América Latina. Esta Primera Conferencia Internacional de Abogados B busca generar un espacio innovador en el que reconocidos abogados de Europa, América Latina, Estados Unidos y otras regiones puedan debatir sobre sobre los asuntos legales relacionados con Empresas B y empresas con propósito.
El contexto
En distintas partes del mundo, están surgiendo iniciativas de derecho privado y público en busca de que el movimiento B encuentre en el Derecho su anclaje. «Las legislaciones tienen la necesidad de crear un marco normativo para las empresas de esta nueva generación que quiere hacer negocios sin descuidar a la gente y al ambiente, lo que se conoce como Triple Impacto. En ese sentido, el movimiento de las Empresas B en el mundo propone repensar las leyes abriendo un nuevo nivel de diálogo en el que se incluya a los emprendedores», explica Pedro Tarak , cofundador de Sistema B.
«En el movimiento B conviven las empresas B, que tienen aspectos jurídicos propios del derecho privado, pero también se está evolucionando hacia el derecho público y el derecho societario comercial, que tiene como protagonista principal a los abogados. Ya hay 34 estados de los Estados Unidos que cuentan con una legislación específica conocida como Benefit Corporations o Corporaciones de Beneficio; en Italia tienen también las Società Benefit y en la Argentina, en este momento, se debate la futura Ley de Beneficio e Interés Colectivo (BIC) o Ley BIC que busca dar identidad a este nuevo tipo de empresas que ya cuentan, además, con el reconocimiento a través de la nueva Ley de Emprendedores impulsada por la Asociación de Emprendedores de Argentina «, concluye Tarak.
+ INFO: Agenda e inscripciones