miércoles 23 de mayo de 2018
Experiencias N+: «Papaíto Piernas Largas», de lectura de infancia a un musical
Un clásico de la literatura infantil y juvenil del siglo pasado, rescatado hoy para el teatro, en El Cultural San Martín, con el cantante Juan Rodó y la dirección de Lía Jelín

A los 12 años leí por primera vez, creo, Papaíto Piernas Largas. Lo debo de haber releído después unas seis o siete veces más (una costumbre que solo se aplicaba en mi caso a los libros que me habían gustado mucho). Por supuesto, también leí Mi querido enemigo, una suerte de secuela de la historia escrita por Jean Webster; ambas novelas fueron best-sellers en el momento en que se publicaron -en 1912 y en 1915, respectivamente-, y por mucho tiempo más después.
De ahí la alegría de saber que ahora vuelve transformado en musical y que, en Buenos Aires, el cantante Juan Rodó tuvo la idea y la obstinación necesaria para llevarlo a escena y cumplir así un sueño muy personal: era una de las lecturas favoritas de su madre. Hasta el 28 de julio puede verse, en la sala Enrique Muiño de El Cultural San Martín (Sarmiento 1551, CABA) el musical Papaíto Piernas Largas, basado en el libro del mismo nombre de Jean Webster, la escritora estadounidense sobrina nieta de Mark Twain.
La bisabuela y la abuela lucharon por la igualdad racial y el derecho al sufragio femenino y en fue en ese entorno cultural que se educó la autora de PPL. Más tarde, ya en la universidad, en el Vassar College, Webster se especializó en inglés y economía, tomó cursos de bienestar social y de reforma penal y comenzó a interesarse en la problemática social, y, como parte de su curso, visitó instituciones para «niños delincuentes e indigentes».
Toda esa experiencia está volcada en su obra como escritora. Aquí, en Papaíto Piernas Largas, la historia es sencilla: Jerusha Abbot, una huérfana de 17 años, alojada desde siempre en el Hogar John Grier, recibe una gran noticia: la directora del Hogar la llama a su oficina. En el camino, Jerusha ve la sombra de uno de los Síndicos (los que mantenían económicamente al orfanato), cuando se marcha, proyectada en la pared. Y esa sombra, de piernas muy largas le recuerda a esas arañas llamadas daddy-long-legs (papaíto piernas largas, en español). Con la directora, Jerusha recibe la noticia de que ese síndico había decidido enviarla a la Universidad para que se convierta en escritora, tras leer una historia suya: él costeará los estudios y le brindará una importante mensualidad, pidiendo a cambio solamente una carta mensual de Jerusha, en la que le cuente sobre sus progresos en los estudios y sus actividades cotidianas. A partir de ese momento, la novela progresa, a través de las cartas que Jerusha envía todos los meses a su tutor, hasta un real final feliz. Real en el sentido de que la historia de amor entre la joven y el desconocido señor John Smith (como quiere ser llamado el síndico de las piernas largas) no es sencilla y, en su transcurso, Jerusha madura, aprueba brillantemente sus exámenes y hasta vende un cuento para una revista. Es decir, es una mujer que estudia, trabaja, habrá de mantenerse sola y, por fin, encontrará ese compañero de vida que la comprende y la estima en lo que vale.
Deliciosamente musicalizada, la historia cantada por Juan Rodó (Papaíto) y la encantadora Ángeles Díaz Colodrero (Jerusha), con la dirección de la prestigiosa Lía Jelín, es digna de verse por varios motivos: por la excelencia de la puesta en escena y de la interpretación, amén de todos los detalles técnicos, también impecables; por el recuerdo de una historia y una protagonista que ya en su momento se adelantaban a la época y mostraban un perfil femenino diferente; porque vale la pena revisitar El Cultural San Martín, con una riquísima actividad en todos sus espacios, y porque una historia de amor bien contada es siempre una tentación que no se puede rechazar.
+ INFO: funciones, sábados a las 21 horas, y domingos a las 20; entradas en http://tuentrada.com o en boletería del teatro; Twitter: @papaitomusical, @culturalsanmar