José Lumerman, emprendedor de Ashoka, estableció un modelo terapeútico de atención de salud mental que ha cambiado la manera de encarar estas enfermedades. Llegó a Neuquén cuando en la provincia no había ni psicólogos ni psiquiatras, y hoy su programa integra el Proyecto Global de Salud Mental impulsado por la Universidad de Columbia, Estados Unidos.
Psiquiatra y luchador, Lumerman fundó en 1994 el Instituto Austral de Salud Mental. ¿La particularidad del proyecto? La integración y el compromiso de la comunidad para brindar ayuda, y transformar a médicos generales y enfermeros en agentes capaces de diagnósticar y tratar enfermedades mentales graves. “Desde el principio capacitamos a los recursos locales, que no contaban con las herramientas propias de la especialidad. Aunque en realidad lo que necesitan son criterios básicos, que se pueden incorporar, relacionados con el sentido común y con el acompañamiento”, señala este emprendedor.
En los comienzos, los médicos y los pacientes fueron muy receptivos con la idea. Hoy más que nunca, pues este trabajo ha modificado la vida de más de 3500 personas que fueron apoyadas. “Hacemos sólo tratamientos ambulatorios, y si es necesario, también internaciones, pero domiciliarias (tiene que existir una familia lo suficientemente continente y un paciente sin excitación). Esto es algo bueno, porque es simple. Y el equipo de profesionales va a las visitas a la casa, y así también los médicos conocen el entorno de cada persona. Hay que terminar con el estigma de las enfermedades mentales; es una enfermedad médica como otras”, explica Lumerman.
En 2008, la Organización Mundial de la Salud (OMS) comenzó a difundir su modelo terapéutico como alternativa para que médicos de la atención primaria de todo el mundo cuenten con herramientas para atender y dar respuestas a pacientes con enfermedades mentales. Además, el Instituto, como parte de los tratamientos, fomenta la integración de los pacientes en talleres de microemprendimientos. “Nuestra misión es la reinserción social y productiva en la comunidad”, define su promotor.
Alianzas internacionales
Visitó recientemente el Instituto Austral de Salud Mental Ezra Susser, profesor de Epidemiología y Psiquiatría, y codirector del departamento de Salud Mental Global de la Universidad de Columbia, una de las instituciones más reconocidas a nivel internacional en el sector. “Confiamos en este modelo porque lo vimos crecer, sabemos que es sustentable, ha transformado la atención y conocemos su impacto en la sociedad, en los pacientes y en los médicos. En el programa todos los aspectos de la ciudad se ven implicados, eso es gran parte de la novedad y lo bueno”, resalta Susser.
El profesor Susser conoce el proyecto de Lumerman desde los orígenes, lo siguió y guió año tras año. Fue acompañando cada etapa y ahora lo hace para dar un paso de cooperación y unión latinoamericana. Ambos, recién llegados de Río de Janeiro y Santiago de Chile, quieren institucionalizar este modelo a través de una red que tendrá sus anclajes en Chile y Brasil, y en la Argentina.
“Es fundamental lograr una integración latinoamericana, no sólo desde los discursos de nuestros dirigentes”, aclama Lumerman con una sonrisa esperanzadora. La construcción de la red incluirá un trabajo epidemiológico previo, para determinar hacia dónde evoluciona el problema de la salud mental. «No hay estadísticas, de manera que eso es lo primero para poder hacer un diagnóstico puntual y regional, y luego plantearse las alternativas asistenciales necesarias», explicó Lumerman.
Como dato relevante, este fellow de Ashoka remarcó que “la salud mental es la cenicienta de la salud, porque está entre los diez problemas epidemiológicos más graves de la humanidad y, sin embargo, sólo recibe un 3 por ciento del presupuesto».
+ INFO: www.ashoka.org/fellow/3192
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