Los equipos informáticos y electrónicos que ya han agotado su vida útil en las empresas pueden seguir siendo válidos para muchas otras funciones. Así lo afirma Fun, compañía dedicada a la compra y recuperación de estos productos con la finalidad de reintroducirlos en el mercado. De este modo se consigue aumentar su rentabilidad económica y también su sostenibilidad medioambiental.
Los impulsores de esta iniciativa son ingenieros que han trabajado para importantes multinacionales de la informática, como explica a Noticias Positivas Francesc Navarro, uno de los dos socios fundadores de la empresa, ubicada en la localidad zaragozana de La Muela. “Queríamos hacer algo por la conservación del medioambiente y al final decidimos montar un proyecto relacionado con el reciclaje de la electrónica, aunque al final somos más recuperadores que recicladores”, añade.
Navarro y su socio han desarrollado a través de Fun su concepto de la electrónica verde, basado en la recuperación de los equipos. “Nos dedicamos a reintroducir en el mercado los equipos electrónicos usados que de otra manera acabarían en vertederos o reciclados, lo cual que es mejor que terminar en la basura, pero la opción más sostenible y competitiva es extender el ciclo de vida de los productos”.
La empresa se ocupa de equipos defectuosos que a sus fabricantes no les merece la pena reparar debido a que los costes de dicha reparación resultan demasiado elevados para la rentabilidad que obtendrían. Fun repara estos productos empleando métodos que posibilitan una reducción al máximo de estos costes. Después se define la funcionalidad de cada equipo reparado y se le buscan nuevos usos alternativos.
“Por ejemplo, un portátil con la pantalla rota puede ser útil, y de hecho los vendemos. Si los sacamos al 20% de su precio, a mucha gente le sale rentable conectarle una pantalla externa para emplearlo como un ordenador de sobremesa o como segundo ordenador”, explica Navarro.
Fun recupera unas 3.000 unidades al mes de productos electrónicos de todas las familias, como ordenadores, teléfonos móviles, teclados, ratones, reproductores de DVD, altavoces, etc. Se recuperan equipos de fabricantes, distribuidores, tiendas y empresas de toda España. Estos productos recuperados se venden también a empresas y particulares de todo el territorial nacional a través de la tienda virtual.
La compañía está participada por el Gobierno de Aragón a través de una sociedad de inversión y también cuenta con el apoyo de la Fundación Creas y de Ecología y Desarrollo.
Otra destacada colaboración es la que está llevando a cabo con varios colegios aragoneses interesados en contar con su propia aula de informática a precio reducido. Navarro explica que cuando las empresas renuevan sus equipos informáticos, a menudo se deshacen de ordenadores que aunque ya tienen varios años son perfectamente válidos para el aprendizaje. “Es posible conseguir toda un aula informática por tan sólo 600 euros en total”, destaca. El software instalado en estos equipos es siempre de código abierto.